Todos los dueños de perros desean que estos tengan una vida plena y feliz, siempre empezando por su alimentación. Es probable que hayas oído hablar de la dieta BARF y todos sus beneficios, pero necesitas informarte más y una de esas preguntas que te haces es a qué edad se puede dar la dieta BARF. Por eso, desde Naturcanin, nuestra tienda de comida BARF, te vamos a contar todos los datos que necesitas saber sobre esta dieta.
Todo lo que debes saber sobre la dieta BARF
La dieta BARF consiste en dar a tu mascota una alimentación a base de alimentos crudos. Este tipo de alimentación está formada por carne magra, órganos, vísceras, fruta y verduras. Los beneficios que otorga este tipo de alimentación son:
- Ofrece más energía y vitalidad.
- Evita el mal aliento.
- Aumento de la masa muscular.
- Limpia los dientes y evita problemas posteriores en la boca.
- Evita problemas de piel e infecciones en los oídos.
- Aumenta la hidratación.
- Resistencia a parásitos en general.
- Evita problemas de artritis y de articulaciones.
Si todas estas ventajas te parecen excelentes y quieres empezar a utilizar esta dieta con tu mascota, debes saber que puedes empezar a ofrecérsela a partir de los 2-3 meses. Eso sí, debes saber que la dosis que tienes que darle se encuentra entre el 1,5 y el 10% de su peso total, teniendo en cuenta también su edad y actividad diaria. Así, un cachorro deberá comer un 10% de su peso, mientras que un perro adulto normal, un 2,5%.
Dentro de la cantidad de la dieta BARF debe estar compuesto por un 60% de carne, 15% verduras, 10% vísceras y 5% fruta.
Cuanto antes empieces a dar a tu perro esta dieta, mejor, pues los piensos no poseen todo el valor nutricional que necesitan, considerándose alimentos procesados. Si tu perro ya está en la categoría de senior y quieres empezar a darle una alimentación más natural, deberás tener cuidado y paciencia. Cuidado porque el organismo de tu perro ya está acostumbrado a tener una dieta más “tóxica” y sabe procesarlo. Si le empiezas a dar una alimentación más natural, tienes que hacerlo de forma gradual y a través de una dieta blanda para que el organismo se vaya adaptando. La paciencia es clave, pues es posible que tu perro tenga alteraciones gastrointestinales, pero poco a poco irá mejorando.
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